En primera línea de playa, estos exclusivos apartamentos con unas vistas que no tienen precio, y donde el metal y la madera se unen de una forma elegante y actual, fueron el escenario perfecto para un cambio radical.
Creando paso a paso. Invitada por mis clientes a participar en la gestión de compra-venta del apartamento, lo mejor vino después. Antes de empezar, y en estrecha colaboración con ellos, estudiamos sus necesidades para reflejarlas en cada rincón de los más de 150 m2 que teníamos a nuestra disposición.
En cada reunión se iba cerrando el círculo, y el Proyecto de Distribución y Reforma iba tomando forma. Una vez las cosas claras, y mucha ilusión comenzamos con la demolición para poder distribuir los nuevos espacios. Durante 6 meses, nuestro equipo se entregó por completo a hacer realidad lo que estaba plasmado en el papel, para convertir este apartamento en un lugar especial y único donde vivir.
Los detalles nos definen. Colores, texturas, iluminación, materiales… Todo consensuado con los clientes para crearles el hogar perfecto. Invitamos a entrar al mar y al cielo a través de los tonos azules y turquesas, combinados con los blanco y arenas, para conseguir el efecto de que, estando en casa, nos sintiéramos en la propia playa. Maderas, mimbres, terciopelos y wallpapers nos han permitido conseguir ambientes actuales y atemporales, y es que, solo hay que ver lo satisfechos que han quedado mis clientes.