Una cafetería muy chic/
Este proyecto es de esos trabajos que se presentan casi por casualidad. El cliente vino a nosotros pidiéndonos socorro más que ayuda, por la premura de sus necesidades.
Reformar y reconstruir.
Dentro de un centro comercial tenían una cafetería que con el tiempo se había quedado desfasada, no solo estética, sino también funcionalmente. Ya no se hacía cómodo trabajar allí, y eso se trasladaba al propio entorno, y al cliente.
Los clientes se dieron cuenta que debían reciclarse o morir, y decidieron esto segundo. ¿El inconveniente? El tiempo que teníamos para presentar un proyecto de reforma, aprobarlo y ejecutarlo, y que mientras, el establecimiento debía seguir abierto para dar servicio a los visitantes y tiendas del centro.
Aire bohochic, nos gusta.
Creo que ha sido el trabajo más trepidante y divertido que he hecho hasta ahora, sin contar el de la caravana, claro. Disponíamos solo de dos imposiciones del cliente. Por una parte, conseguir un espacio visualmente atractivo y acogedor, acorde a los cambios actuales del centro. Por otra, y fundamental, convertir el poco espacio disponible en un lugar cómodo y práctico para trabajar.
Desde el principio, la idea fue convertir este chiringuito en una cafetería chic, pero sin perder la esencia de sus orígenes. Así que no solo reubicamos el espacio interior, sino que también mejoramos la zona exterior.
Forramos todo el exterior de madera desgastada para darle ese aire bohochic que tanto nos gusta, y que tan bien acompañaba el espacio, y con unos detalles aquí y otros allí, unas plantitas, unos espejos, unos taburetes y unas mesas, conseguimos un resultado espectacular.
Contado así parece sencillo, ¿verdad? Pero cada detalle lo pensamos muy mucho para crear un ambiente actual y diferente donde pasar un agradable momento de relax entre compra y compra.