La máxima expresión de elegancia y distinción, materializada en 400 metros cuadrados de casa.

Nuestro cliente buscaba espacios elegantes, que llevasen a la distinción y exclusividad. Y a nosotros nos encantó la idea. Para llevarlo a cabo, se planteó el interiorismo desde cero, eligiendo desde los acabados de las telas de pequeños detalles hasta las piedras que conforman paredes y suelos. Al tratarse de una casa tan espaciosa, supuso un gran reto dar uniformidad a todas las estancias, pero marcando la distinción en cada una de ellas.

Para dotar de comodidad y esplendor a los espacios amplios, trabajamos con los contrastes en las paredes y los suelos, regalando una armonía visual contrastada mediante patrones, texturas y colores. Variando entre madera y mármol.

La decoración del espacio está inspirada en tonos metálicos plateados y dorados que se complementan a la perfección con el negro envolvente, todo ello reflejado en un suelo pulido. Los listones en negro lacado otorgan uniformidad en todos los rincones, creando una experiencia muy elegante y sofisticada.

Calidad, exclusividad y estilo. Conseguir poder unir estos tres conceptos ha sido todo un reto que al final hemos conseguido.

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